El camino de la meditación.


Durante las vacaciones tuve la oportunidad de estar en un lugar pacífico, en balance armónico. No había tráfico, poca gente, el cielo limpio y el mar en calma. La práctica de ashtanga yoga fue genial y era fácil entrar en estados de meditación profunda. Comúnmente es sencillo olvidar el verdadero propósito del yoga. Practicamos porque queremos estar en una mejor condición física, porque entramos en estados de paz y quietud y porque experimentamos un estado de bienestar general. Sin embargo, salimos del shala (o salón de práctica) y entramos en la dinámica diaria de una ciudad con miles de habitantes. Al día siguiente volvemos a nuestra clase de yoga y entramos una vez más en ese estado que disfrutamos tanto. Y así generamos una rueda constante y olvidamos el gran regalo de libertad que la práctica del yoga nos brinda. Por eso considero necesario incorporar, en la medida de nuestras posibilidades, la meditación a la vida diaria. Medita, medita, medita. Es sencillo, es práctico y comienzas a experimentar los beneficios de manera inmediata. La meditación te ayudará a entender los beneficios liberadores de los que estoy escribiendo pero necesitas constancia. Comienza con 15 minutos diarios y ve aumentando la frecuencia gradualmente. Seguramente los primeros días te sentirás más agitado, la mente comenzará a ir de un lado a otro, pero al final cederá. La practica del ashtanga yoga y de otros estilos te permitirá controlar la respiración y fortalecer el cuerpo para establecer una postura firme de meditación. La práctica de las ásanas de yoga te llevan a la meditación. La meditación te lleva a las posturas de yoga. ¿Cómo comenzar? Anteriormente se habló con más detalles de cómo establecer una práctica constante de meditación. Aquí un recordatorio:
1. Elige un lugar para tu práctica que esté limpio y sin interrupciones. Procura hacerlo siempre en el mismo lugar.
2. Fija una hora para meditar. Si practicas ashtanga yoga en la mañana, quizás puedas meditar en la tarde o viceversa. La hora más recomendable para meditar es muy temprano en la mañana.
3. Sientáte en una postura cómoda, con la columna recta. Revisa el artículo que está en este blog sobre el tema de la postura.
4. Enfócate en la respiración. Inhala y exhala por la nariz, de manera normal y escucha el sonido de tu respiración. Cierra los ojos y en cada inhalación repite mentalmente SO y en cada exhalación HAM. El mantra SoHam significa YO SOY ESO.
5. Medita durante 15 o 20 minutos con la mayor frecuencia que te sea posible. Puedes prender una vela o incienso. Te ayudará a crear un espacio propicio.

Medita y como dijo K. Pattabhi Jois, la teoría no funciona. Para ver beneficios: 99% práctica 1% teoría.

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